¿Sabías que el mindfulness también puede aplicarse en marketing?
Te diremos qué es el mindful marketing y cómo puede ayudarte a mejorar la identidad de tu marca
Los orígenes
Antes de empezar con el mindful marketing, debemos ir al origen: el mindfulness. Por si no lo conocías, es una práctica de meditación que viene de las culturas orientales. Su objetivo es devolvernos al momento presente para que prestemos atención a lo que ocurre a nuestro alrededor y lo observemos con interés y aceptación.
En Occidente aplicamos esta práctica desde hace varios años para ayudarnos a lidiar con el estrés causado por nuestro estilo de vida. También se ha incorporado a tratamientos médicos y psicológicos en los que ha tenido muy buenos resultados, por cierto.
Además la implementamos en el marketing y es una de las tendencias más exitosas del momento, sobre todo en estos tiempos tan difíciles en los que la empatía y la conexión con las personas son más importantes que nunca.
Ahora sí, ¿qué es el mindful marketing?
Aunque tal vez ya te imaginas por dónde va esto, es momento de ir al grano y contarte cómo funciona en el marketing.
Muchos de los consumidores actuales, en especial los más jóvenes, están algo decepcionados del marketing tradicional e incluso lo ven como algo con poca credibilidad.
También nos encontramos en un momento de cambio, por esta razón, dichos consumidores ponen muchas expectativas en las marcas que sí les agradan y esperan que se posicionen respecto a las problemáticas y las situaciones actuales del mundo.
Pero no quieren que esto sean solo palabras que formen parte de un bonito eslogan. Quieren verlo en acciones reales y concretas que atiendan las causas de esas problemáticas y que de verdad contribuyan a un cambio o una posible solución.
Por esto podríamos decir que se trata de un nuevo nivel de responsabilidad social en el que las marcas deben demostrar su compromiso con el mundo, con sus valores y con sus clientes, así como sacar su lado más humano, empático y emocional.
Sin embargo, el énfasis de esta estrategia no está en vender, sino en conectar al cliente con la marca o afianzar ese lazo. Es la oportunidad perfecta para que escuches de manera activa a cada uno de tus clientes y conozcas con exactitud qué causas les interesan, qué es lo que les mueve y cuáles son sus principales valores.
Sus claves
Esta estrategia cuenta con algunos fundamentos que no puedes dejar pasar si vas a aplicarla. Estos son:
- Las personas son lo principal, las protagonistas
Lo que tus clientes tienen que decir es lo más importante. Escucha de forma atenta sus preocupaciones y necesidades, así podrás empezar a trazar un camino para llegar a ellos.
- Las acciones siempre deben reflejar los valores
Las acciones de tu empresa tienen que ser congruentes con sus principios y sus valores. Cada una debe demostrar su compromiso con el planeta y las personas que lo habitan, no solo con los clientes.
- Transparencia y conciencia van de la mano
La honestidad y la transparencia en el proceso de tus productos y/o servicios son muy relevantes para los clientes: ¡muéstralo! Generarás confianza y añadirás valor a la marca. Así ellos estarán convencidos de que hacen un consumo consciente y de que no solo están comprando, sino que también están contribuyendo a construir un mundo mejor.
- El significado hace la diferencia
En relación con el punto anterior, es primordial que busques el significado de tu empresa o tu marca. Pregúntate: ¿por qué decidiste iniciarla? (Además de lo económico). ¿Cómo piensas ayudar a las personas a través de ella? ¿Qué aporte le hará al mundo? ¡Refleja esa gran misión que quieres cumplir en beneficio de todos!
¿Cómo hacerlo?
Tal vez al principio suena muy complicado, pero creemos que si la apertura y la flexibilidad te definen, no te va a costar demasiado implementar esto en tu estrategia de marketing.
Aún así, aquí hay algunos tips para que te inicies en mindful marketing:
El storytelling será tu mejor herramienta. Cuéntale a tus clientes de manera persuasiva cómo tu empresa decidió comenzar a apoyar tal o cual causa e interésalos en las mejoras o los beneficios se han logrado como consecuencia.
Usa la inteligencia emocional. Humanízate y conecta con las emociones de las personas a través de tu mensaje. Esto las hará sentir más cercanas a tu marca.